Lapandemia del COVID-19 ha sacudido a toda nuestra sociedad. Las entidadesmiembro del Movimiento Asociativo de la Parálisis Cerebral se han sumado a lasmedidas impulsadas por el Gobierno de España para frenar la curva de expansióndel coronavirus, quedándose en casa y procediendo al cierre de todos losservicios de atención a la parálisis cerebral, excepto los residenciales.
El80% de las personas con parálisis cerebral tienen grandes necesidades de apoyo.Estas necesidades no desaparecen con la situación de confinamiento en la quelas familias pasan a asumir durante 24 horas al día cuidados y en el que lasentidades realizan seguimiento de las personas usuarias para ofrecer pautas quelimiten el perjuicio de la ausencia de tratamientos. El efecto de esta coyunturaes muy preocupante en las personas usuarias de atención temprana, conalteraciones de conducta o afectaciones de salud, aseguran desde ASPACE.
"Elintento de las entidades por mitigar el impacto del COVID-19 en la atención alas personas con parálisis cerebral se ve dificultado por la falta de personalque pueda desplazarse a los domicilios, por la escasez de EPIs para abordaresta labor y por la carencia de profesionales, dado que una parte debe de permaneceren cuarentena", señalan. Además, "esta situación pone en riesgo la sostenibilidad de lasentidades: el descuento en los conciertos de las plazas no ocupadas, lacancelación de actividades subvencionadas y el cese de prestaciones vinculadasa servicios; han obligado a gran parte de ellas a aplicar ERTEs".
Todosestos factores no solo ponen en riesgo los avances sociosanitarios alcanzadospor Confederación ASPACE y sus entidades a lo largo de más de 35 años detrayectoria, sino también la calidad de vida, la participación social y elejercicio de derechos de 120.000 personas con parálisis cerebral y susfamilias. Por todo ello, desde elMovimiento ASPACE realizan las siguientes propuestas de acción para corregirlos problemas surgidos en esta crisis:
1.Reconocimientode las personas con parálisis cerebral y grandes necesidades de apoyo comocolectivo de alto riesgo por su característica pluridiscapacidad. Una vez cubiertas las necesidades denuestro personal sanitario en Hospitales y UCIs, se debe priorizar elabastecimiento de material de protección individual a profesionales de atencióna la parálisis cerebral, a las personas con parálisis cerebral y a susfamilias.
2.Garantizarel suministro a los Centros Residenciales de EPIs, material de desinfección yde medicación habitual o puntual de las personas usuarias. Elaborar protocolos claros deactuación en caso de contagio que tengan en cuenta el manejo de las personascon trastornos del comportamiento.
3.Garantizarel derecho a la vida y a la salud de las personas con parálisis cerebral. Promulgar el acercamiento al colectivoen igualdad de condiciones y bajo la premisa de no discriminación por razonesde discapacidad; ser parte de los colectivos prioritarios en atención yseguimiento sanitario.
4.Creaciónde una bolsa de trabajadores del ámbito social para la eventual sustitución deprofesionales en situación de cuarentena y promover campañas de voluntariadosocial para atender a las personas más vulnerables.
5.Generarmecanismos de apoyo a los Centros Especiales de Empleo y a las personas con discapacidad quetrabajan en ellos para no poner en peligro su viabilidad ni tampoco perjudicarlos trabajadores
6.Lascorporaciones locales primarán la limpieza en la atención domiciliaria, yprestarán servicios de compra y apoyo para las personasen mayor riesgo.
7.Las prestaciones transitorias de la Seguridad Social destinadas a padresque deben permanecer en su domicilio al cuidado de sus hijos por el cierre decolegios; se deben extender a lasfamilias de personas adultas con discapacidad afectadas por el cierre decentros de atención a la discapacidad.
8.Ante el uso de hoteles como espaciossanitarios para atender a personas con COVID-19; señalar que la accesibilidadde estos lugares debería ser un criterio a tener en cuenta para atender apersonas con parálisis cerebral en los mismos.
Encuanto a la financiación de lasentidades, ASPACE reitera que son necesarias cuatro medidas que garantizarían lasostenibilidad de la atención a la parálisis cerebral a medio plazo:
1. Mantenerel importe íntegro de los conciertos sin reducciones por no utilización deplazas.
2. Crearlíneas de ayudas para entidades que prestan servicios no concertados paramantener la atención una vez superado el estado de alarma, mitigando el impactode ERTEs y despidos.
3. Modificarcondiciones de las subvenciones concedidas facilitando la ampliación de plazosde ejecución, la revisión de objetivos y la admisión como gastos financiablescancelaciones y otros causados por esta situación.
4. Dotarde financiación para desarrollar Servicios de Atención Domiciliaria que antesno existían y que ahora se impulsan en apoyo y respiro de las familias depersonas con grandes necesidades de apoyo que permanecen confinadas.
Comoen toda su historia de activismo social, Confederación ASPACE y las entidadesde atención a la parálisis cerebral realizan estas propuestas desde una visiónconstructiva y colaborativa. "Las personas con parálisis cerebral y sus familiasno pueden ser un colectivo olvidado en esta crisis", aseguran, y por todo ello, esperan que estas medidas permitan evitar una situación de injusticia social con un colectivomuy vulnerable.
Mientrastanto, el Movimiento ASPACE explica que seguirá trabajando junto al Gobierno y susAdministraciones como desde el inicio de la crisis para aportar soluciones queayuden a superar esta pandemia.