Dentro del proceso de audiencia e información pública del proyecto de Real Decreto que modifica la intervención sectorial vitivinícola en el marco del Plan Estratégico de la PAC, las organizaciones profesionales agrarias Asaja, COAG y UPA han solicitado al Ministerio de Agricultura la inclusión de una medida de inversiones en explotaciones vitivinícolas dentro de la Intervención Sectorial del Vino (ISV).
Según un comunicado de las tres organizaciones recogido por Ical, esta intervención se basaría en inversiones destinadas a actuaciones como la mejora del uso y la gestión del agua; la conversión a la producción ecológica; la introducción de técnicas de producción integrada; la adquisición de equipos para métodos de producción de precisión o digitalización; la contribución a la conservación del suelo y la mejora de la retención del carbono del suelo; la creación o preservación de hábitats favorables a la biodiversidad o el mantenimiento del paisaje, incluida la conservación de sus características históricas o la reducción de la generación de residuos y la mejora de la gestión de residuos.
A su vez, proponen el establecimiento de condicionantes en las diferentes medidas dentro de la intervención sectorial vitivinícola como la reestructuración y reconversión de viñedo, las inversiones en instalaciones de transformación y en infraestructuras vitivinícola, las actividades de promoción y comunicación en países terceros y la eliminación de subproductos y cosecha en verde.
Además, consideran que los solicitantes y potenciales beneficiarios de estas medidas, sean personas físicas y jurídicas, que estén sancionadas por incumplimiento grave o muy grave de la Ley de la cadena alimentaria no opten a ser beneficiarios de estas ayudas.
Por último, de cara a la protección ante los daños producido por conejos, los viticultores reclaman ampliar la ayuda actual relativa a protectores a otros sistemas de prevención: vallados, ahuyentadores, posaderos de rapaces, hurones, etc.
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