“Las cifras actuales son dramáticas para los ganaderos y confirman que la actual gestión del lobo en Castilla y León está permitiendo la expansión descontrolada de esta especie, y está provocando daños económicos cuantiosos entre la cabaña ganadera extensiva de nuestra provincia, una de las más importantes de todo el país”, denuncia en un comunicado UPA Zamora.
Los datos cada vez son más concluyentes sobre la extrema gravedad del asunto, y es que los ataques de lobos en nuestra región siguen incrementándose mes tras mes, con casos especialmente significativos como Zamora, Ávila y Segovia donde la presión a los ganaderos es extrema.
En el comunicado remitido, UPA agrega que “el enorme incremento de la población de lobos en los últimos años, tanto al norte como al sur del Duero, debe hacer recapacitara los responsables políticos de esta comunidad autónoma, de nuestro país e incluso de Europa. Y es que lejos de una gestión adecuada la especie se está multiplicando a ritmo vertiginoso hasta el punto de hacer imposible la viabilidad económica de cientos de explotaciones ganaderas en zonas de montaña y sierra de la provincia, como es el caso actual de la manada localizada en la zona de Codesal. La Administración regional tiene la obligación de proteger a los ciudadanos y sus bienes antes que nada, y eso se recoge incluso en la Directiva Hábitat a nivel europeo”.
En el contexto de la celebración de las Primeras Jornadas del Lobo Ibérico en Zamora, esta organización reclama sentido común ante la situación actual que están atravesando las ganaderías extensivas en nuestra provincia. Piden una reflexión sobre las consecuencias que tendría para las producciones ganaderas de calidad vinculadas a esta actividad profesional y para la sociedad en su conjunto la desaparición de las mismas, en una realidad actual con un medio rural plagado de fauna salvaje y cada vez con menos población.
Datos sobre el lobo y actuaciones que reclama UPA-ZAMORA
• El número de ataques de lobos crece año tras año. En los últimos meses un 39 %. En el periodo enero-septiembre de 2018 en la provincia de Zamora ya se habían producido más ataques queen todo el año 2017. Y falta por conocer los datos del último trimestre del año.
• Hay contabilizadas en Castilla y León cerca de 200 manadas de lobos con unos 1.900 lobos. Ha aumentado su densidad en el norte de la comunidad a la par que ha colonizado y se consolida en el sur.
• UPA solicita el cumplimiento del Artículo 16 en su punto 1, apartado B y C de la Directiva europea Hábitat que hace referencia a las excepciones de la protección del lobo “para evitar daños graves al ganado…. Y por razones imperativas de interés público de primer orden, incluidas las de carácter socioeconómico….”
• UPA solicita establecer un sistema de pagos compensatorios derivados de los daños producidos por el lobo en explotaciones ganaderas aún más ágil y directo en los pagos, y actualizándolo todos los años.
• UPA solicita, dada la especial problemática y conflictividad por daños en ganadería en determinadas comarcas al Norte y Sur del Duero, que se proceda de forma inmediata a la extracción de ejemplares con el objetivo de minorar los daños.
• UPA exige a la Consejería de Medio Ambiente un control riguroso de todas las especies, no solamente del lobo, porque la actual proliferación y presión de ciervos, jabalís, conejos, etc., está poniendo en serio peligro la pervivencia de la actividad agrícola y ganadera.
• UPA exige a la Junta de Castilla y León que facilite en cualquier momento del año las batidas, esperas, descastes, incluso el desarrollo controlado de la actividad cinegética para aquellas especies de caza como lobos, jabalís, ciervas, conejos, etc., donde se constate existan daños en cultivos y ganado.
• UPA recuerda que el mismo grado de responsabilidad que asumimos los ganaderos en nuestra labor diaria produciendo la máxima calidad de carne y leche respetando el medio ambiente, tal y como nos exigen las administraciones competentes, lo reclamamos tanto para los Gobiernos como para los ecologistas en una tema como es el de los lobos.