El secretario autonómico de Despoblación, Mundo Rural y Soberanía Alimentaria, Rubén Valín, ha calificado de “infame” la actitud de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente con respecto a la problemática del lobo, con motivo de la intención del consejero, Juan Carlos Suárez-Quiñones, de aplicar medidas consentidas en Francia, que pasan por autorizar a los ganaderos a atacar a los cánidos.
“Una vez más la Junta se comporta de manera irresponsable: no sólo han permitido que les echen abajo el Plan de Gestión del Lobo, sino que regala demagogia a los ganaderos y les pasa a ellos una responsabilidad que no les corresponde”, ha reprochado Rubén Valín.
Desde Podemos Castilla y León proponen varias medidas para solucionar el conflicto: en primer lugar, un marco de diálogo en el que se incluya a las distintas administraciones, sindicatos agrarios y grupos de conservación del lobo. Así mismo, defienden la dignificación de la figura del pastor, sobre todo en aquellas zonas afectadas por la presencia del lobo, mediante incentivos financieros que premien las buenas prácticas. A esto añaden la importancia de una legislación que favorezca a los animales que acompañan al ganadero, es decir, los perros pastor o de guardia.
“Bastante tienen los ganaderos con una PAC en decadencia, con circunstancias profesionales adversas y con luchar con mercados neoliberales en los que los precios oscilan de forma ostensible”, ha lamentado el responsable autonómico de Mundo Rural, añadiendo que “a los ganaderos sólo se les debe pedir cosas de ganaderos” en lugar de “que tomen la escopeta y maten lobos”.