Las Cortes de Castilla y León, con la abstención de UPL-Soria Ya, Unidas Podemos y Francisco Igea, han admitido a trámite la modificación de la Ley de Sanidad Animal que, como han pedido sus proponentes --PP y Vox--, se hará previsiblemente por el procedimiento de lectura única y a través de la que se abre la puerta a contratar veterinarios privados para controles sanitarios oficiales ante la falta de personal público.
La iniciativa ha sido defendida por PP y Vox, grupos que decidieron iniciar la tramitación de esta modificación normativa a través de esta Proposición de Ley después de que fuera rechazada vía enmienda a la Ley de Medidas Tributarias que acompaña al Presupuesto.
El portavoz de Vox en las Cortes de Castilla y León, Carlos Menéndez, ha defendido en el Pleno la necesidad de revisar toda la normativa en materia de sanidad animal para adaptarla a la realidad de las explotaciones de la Comunidad, objetivo principal de la modificación de la Ley de Sanidad Animal que su grupo presenta junto al PP.
El procurador ha defendido trabajar en una normativa que "no perjudique la viabilidad económica y la competitividad de las explotaciones" y ha recordado que una de las medidas que siempre ha defendido Vox ha sido "la defensa del mundo rural con el apoyo a la industria agroalimentaria, a la producción de las pequeñas y medianas explotaciones y la defensa del sector primario desde el refuerzo de la seguridad de las explotaciones".
"Nunca antes en Castilla y León, desde un grupo parlamentario o desde el Gobierno de la Comunidad, se había defendido con más énfasis la mejora y la conservación de nuestra actividad agrícola, ganadera y de la propia industria agroalimentaria", ha afirmado Menéndez.
Por su parte, el procurador del PP Óscar Reguera ha defendido la Proposición de Ley que viene a sustituir la normativa aprobada hace 30 años, cuando, como ha recordado, él era director General de Agricultura y Ganadería de la Junta. "Jamás pensé que tendría el honor también de asistir a su modificación", ha reflexionado.
"Esta Ley que hoy modificamos fue la primera Ley de Sanidad Animal que se aprobó en España y con ella Castilla y León dispuso, después de 42 años, de una Ley moderna que adecuó al marco constitucional", ha explicado Reguera, tras lo que ha considerado que durante su aplicación "ha supuesto un enorme, constante e incuestionable progreso y avance de la sanidad animal" en cuestiones como la detección, la prevención, la lucha, el control y la erradicación de enfermedades.
Por último, Reguera ha defendido que la Ley de Bienestar Animal ha situado a Castilla y León "en niveles sanitarios comparables a los países más avanzados de la Unión Europea", por lo que ha confiado en contar en las Cortes con los "consensos básicos" para "avanzar en el progreso sanitario".
No obstante, el portavoz de UPL, Luis Mariano Santos, ha argumentado su abstención en la votación que se basa en la intención de los proponentes de tramitar esta Ley a través del procedimiento de lectura única, lo que "impide aportaciones".
Así, Santos ha asegurado que ve "muchos riesgos" en torno a la decisión adoptada sobre los profesionales veterinarios. "No se si va a ir por buen camino", ha cuestionado.
Por su parte, el procurador del PSOE Juan Luis Cepa se ha mostrado favorable a la tramitación de la normativa, no obstante, ha señalado: "El problema, como siempre, es que cuando se quiere dar este paso nos tendrían que explicar por qué el modelo que existía hasta ahora no ha fracasado, qué es lo que está sucediendo para este cambio de idea".
Cepa ha señalado que la modificación "no es ni mala ni buena, pero sí se puede ser sus efectos posteriores". Así, ha recordado que hasta ahora los saneamientos eran gratuitos para los ganaderos y ha preguntado si lo seguirán siendo ante con la posibilidad de contratar veterinarios privados.
"Vaya por delante, que yo creo que mayoritariamente son profesionales y que harán bien su trabajo y con honestidad este trabajo. Pero no estamos exentos de que se produzcan ciertos excesos o fraudes. ¿Cómo va a garantizar la Administración todos estos extremos?", ha cuestionado el procurador socialista.
Cepa ha insistido en que el grupo parlamentario socialista no se opondrá a la toma en consideración de esta propuesta, pero sí les gustaría que hubiera debate "para mejorarla sustancialmente".
Por último, el procurador Francisco Igea ha reclamado "rigor" y "política a largo plazo" para controlar la evolución de la tuberculosis ganadera en la región. "La prevalencia de la tuberculosis se ha incrementado, con siete comarcas por encima del tres por ciento en 2020, cuando antes había solo tres", ha asegurado.
"El cambio de política no ha traído más que desgracia, y los ganaderos sienten una legítima ansiedad por esta situación", ha lamentado Igea, quien ha insistido en que "no se debe utilizar esa ansiedad para obtener rédito electoral, sino intentar buscar soluciones eficaces".
"Si no logramos controlar y mejorar la sanidad animal y nos quedamos en el populismo, quienes van a sufrir al final son los ganaderos", ha advertido.
MODIFICACIÓN DE LA LEY DE BIENESTAR ANIMAL
Los grupos parlamentarios PP y Vox destacaron en la presentación de la modificación de la Ley de Sanidad Animal de Castilla y León que este cambio tiene como el objetivo de garantizar la aplicación de la legislación, optimizar los controles sanitarios y contemplar la exigencia europea que obliga a que los controles oficiales han de ser efectuados por personal que "sea independiente y no tenga ningún conflicto de intereses".
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