"Los intermediarios del subsector vacuno, tanto de carne como de vida, continúan escudándose en la crisis del coronavirus para bajar los precios a los ganaderos sin que exista una razón objetiva".
Así lo ha vuelto a denunciar COAG Castilla y León que, sin embargo, asegura que los datos del sector los canales de venta de la carne de vacuno están funcionando a pleno rendimiento y muestran subidas del consumo cercanas al 40% en el canal de la distribución y un 5% en el canal de carne ecológica. "Incluso se ha disparado la venta directa en domicilios, dado que muchas empresas que antes vendían a mayoristas ahora venden directamente a los consumidores a través de pedidos por internet".
Sin embargo, según ha podido constatar, "en mercados de Castilla y León, Aragón y de Galicia, los intermediarios están abonando hasta un 30% menos a los ganaderos con explicaciones como el temor a que se colapsen las granjas o se dispare la oferta ante un, hoy por hoy absurdo, temor al retraimiento del consumo".
Asimismo, la OPA explica que igual estrategia están utilizando los intermediarios con el vacuno de vida, el que se compra para cebar en otras explotaciones y vender posteriormente.Aquí, el mercado se está desarrollando también con normalidad e incluso se exporta a países, por ejemplo, africanos. Y sin embargo, los animales están saliendo de las granjas concaídas de precios de hasta un 20 por ciento, porque los mediadores los han hundido unilateralmente.
Aducen en este caso que las ventas se redujeron al iniciarse el estado de alarma, hecho que aunque es cierto no supone de ninguna manera una justificación para derrumbar los precios. En primer lugar, porque este mercado se ha recuperado en las últimas semanas y está ya en valores superiores al 8%. Y en segundo lugar porque se trata de una transacción comercial como otra cualquiera y tiene de estar sujeta a los precios pactados previamente.