El presidente de la cofradía de la Virgen de la Esperanza, Pablo Alonso, hace repaso de la actualidad destacando que en los dos últimos años los hermanos y hermanas han aumentado hasta 300 incorporaciones nuevas y destaca de las obras del Puente de Piedra y el cambio de recorrido que aunque las circunstancias no sean favorables la incorporación a la procesión será más rápida.
- ¿Qué novedades trae este año la cofradía?
La novedad principal es el cambio de recorrido. Saldremos de la Catedral en vez de salir de Cabañales, bajaremos por la cuesta del Pizaro y volveremos al recorrido habitual. Con las obras en el Puente de Piedra no podemos pasar por ahí pero, de esta otra manera nos incorporamos más rapidamente al recorrido que se viene haciendo otros años.
- ¿Cuál es la salud económica y social de la cofradía?
La salud económica es buena, no nos podemos quejar. Ahora puede que tengamos un poco más de gasto por el local y también hemos comprado material que antes no se tenía y siempre era de prestado, son cosas que podemos ir adquiriendo nosotros por ejemplo enseres que nos dejaba siempre la Cofradía de Via Crucis, pues poco a poco nos vamos haciendo con material. Ya se empezó a hacer con la antigua directiva y se sigue esa continuidad. Este año hemos incorporado dos peronillas y el año que viene compraremos las campanas del barandales.
La salud social es muy buena, en estos dos últimos años se han incorporado 300 hermanos y hermanas.
- ¿Qué papel juega la Semana Santa en el desarrollo de Zamora?
Muy importante. Creo que es un motor económico muy importante para la ciudad y una llamada para los que viven fuera. Es algo que hace que la gente que vive fuera durante todo el año y que tiene a Zamora casi olvidada, regrese. Como las personas que vienen en Navidad, pues igual en Semana Santa en Zamora. La parte del turismo también es muy importante y fundamental para la ciudad. Si Zamora no tuviera Semana Santa se resentiría bastante, no solo es el turismo - que con el tema del Museo de Semana Santa se verá afectado- , sino también que la gente de Zamora mueve mucho la cartera, son muchos actos, reuniones, se genera gasto en todos los sectores. Ojalá hubiera tres o cuatro Semana Santas en Zamora ya que parece que los zamoranos nos transformamos para las fechas importantes.
- ¿Qué momento del recorrido procesional recomienda?
Es una obviedad decir que Balborraz, pero recomendaría mucho la entrada a la Catedral y el canto de la Salve que es el acto principal de la procesión. Podría ir más gente porque sobre todo van las personas que buscan a alguien que ha termionado de desfilar pero es un acto muy bonito y la gente solo se centra en Balborraz. El acto principal es la Salve.
- ¿Qué va a suponer el nuevo Museo de Semana Santa?
Zamora siempre ha sido un referente de la Semana Santa. Cuando vas fuera y dices que eres de Zamora, te tienen más respeto y más en cuenta tu opinión y siempre te hablan de Museo ¡qué suerte que teneis un Museo!; ahora no lo tenemos y un edificio adecuado sería muy importante. Sería otra vez una llamada para la gente semana santera si se hace un edificio en condiciones. Ahora mismo tenemos que centrarnos en que empiecen a hacer las obras
- ¿A quién le recomendaría que viniera a ver la Semana Santa?
A cualquiera, no haría distinción pero sobre todo a las personas que tengan unas profundas raíces religiosas porque aquí se vive muy sentido sobre todo por la noche. Al turista le llama la atención y le sobrecoge mucho, es verdad que por la tarde y la mañana son mas parecidas a otros sitios pero las de la noche impactan más. A esas personas a las que les mueve más la fe y encuentran ese recogimiento en las hermandades.
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