El reconocimiento a toda una trayectoria con los cupones como protagonistas: “Intento ser amable con todos y la gente me lo devuelve con creces”
Victoriano Sutil, vendedor zamorano de la ONCE, ha sido condecorado como el mejor de la comunidad durante 2023. Un premio que rinde homenaje a casi 30 años de carrera donde la amabilidad siempre se ha llevado por bandera.
Victoriano Sutil, vendedor zamorano de la ONCE Foto: María Lorenzo
Hace casi 30 años, concretamente en 1995, la vida de Victoriano Sutil cambiaba para siempre. La ONCE, en uno de los momentos más difíciles de su vida, cuando tiene problemas de visión y pierde un ojo, le abría un nuevo mundo que comenzaba en Barcelona y que proseguiría en su tierra, en su Zamora, ocho años más tarde. Tras todo un periplo laboral como vendedor de cupones, ahora le ha llegado uno de los reconocimientos más especiales por su trabajo.
Y es que la delegación de Castilla y León le ha otorgado el premio de mejor vendedor de la ONCE durante el año 2023. Una recompensa que, desde luego, no se esperaba: “Fue una sorpresa impresionante. Es el reconocimiento a muchos años de trabajo”, afirma.
Nada más ni nada menos que veintinueve años en una entidad que se lo ha dado todo cuando más lo necesitaba: “Me lo dieron todo en momentos muy difíciles. Me dieron trabajo, me hicieron crecer como persona… Me han dado estabilidad en todos los sentidos. La ONCE supone todo para mí”, expresa.
“Yo tampoco pido nada; con que me digan “gracias” a mí me vale, pero la gente, por lo general, es muy amable” – Victoriano Sutil, vendedor zamorano de la ONCE.
Victoriano Sutil, vendedor zamorano de la ONCE Foto: María Lorenzo
Desde entonces, no se ha cansado de repartir premios: “He dado cinco ‘gordos’ en cupones, incluido el ‘cuponazo’. En uno de ellos di 1.200.000 euros, con paga incluida, y luego ha habido otros premios de 300.000, de 500.000 euros…”, asegura sobre unas cantidades que, por supuesto, la sociedad zamorana le ha agradecido a posteriori: “Además de las gracias, te dan regalos, te lo agradecen con botellas de vino… Yo tampoco pido nada; con que me digan “gracias” a mí me vale, pero la gente, por lo general, es muy amable”, manifiesta.
Veintiún años en la capital de cercanía, amabilidad y servicio a la ciudadanía, sirviendo, en ocasiones, para todo: “La gente se porta fenomenal conmigo: te cuenta su vida, servimos como psicólogos… Al final intento ser amable con todos y la gente me lo devuelve con creces”, concluye Victoriano sobre un trabajo que ejerce en Zamora, de lunes a viernes y en horario de mañana, en el comienzo de Santa Clara y que, sin duda, después de casi 30 años, le ha regalado una merecida recompensa.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios