David Movilla se despide del Zamora CF: "Triste de irme, pero feliz por haber estado y satisfecho del deber cumplido"

El técnico del Zamora CF se ha despedido de la entidad en rueda de prensa celebrada durante este viernes en el Ruta de la Plata

Despedida de David Movilla (34)
Despedida de David Movilla (34)

Casi 150 partidos y 5 temporadas después, si bien todo dividido en dos etapas, David Movilla se despedía definitivamente del Zamora CF en rueda de prensa celebrada en el Ruta de la Plata durante la mañana de este viernes. Durante el acto también han estado presentes los nuevos propietarios de la entidad, la familia Páez.

Javier Páez, consejero delegado y, por el momento, presidente del club rojiblanco, señalaba que se trataba de "dar la despedida que se merece" al técnico vasco. "Hay que agradecerle muchísimo, es el que ha conseguido este gran ascenso", añdía antes de darle la palabra a Movilla.

AGRADECIMIENTO A LA FAMILIA PÁEZ. Quiero agradecer a la familia Páez el ofrecerme este espacio para despedirme de un club y una ciudad que para mí significan mucho. También agradecerles como ya lo he hecho personalmente, el que hayan decidido invertir su patrimonio en Zamora. Era necesario. Era fundamental el ascenso y que el club pudiera tener viabilidad. Si no, no sabemos dónde estaría este club.

AGRADECIMIENTO A ALDAMA. No me gustaría marcharme sin agradecerle a Víctor. Hace un año volvió a apostar por mí, reconociendo no solo privada, sino públicamente que se había equivocado en mi salida en la anterior etapa, y eso es de agradecer. 

AGRADECIMIENTO A LOS JUGADORES. Dar las gracias a los jugadores que han honrado su profesió y han llevado al Zamora a esta categoría, y a los que no la han honrado porque me han hecho mejor entrenador.

AGRADECIMIENTO AL STAFF. Han hecho un trabajo impagable. Han arrimado el hombro para ayudar a los jugadores a conseguir este final. 

AGRADECIMIENTO A TRABAJADORES DEL CLUB. No quiero dejarme a nadie. Especialmente a Jose y María, que son el emblema del club, a Gabino, a Carlos y a todos los que me han hecho el día a día más fácil.

DAVID ÁNGEL. Ha trabajado en la sombra. Hoy está claro que hay club gracias a la familia Páez. Pero tengo claro que su liderazgo, su compromiso por el Zamora y su constancia han sido determinantes para que siga siendo equipo de Primera RFEF. En los últimos meses, en los momentos críticos, me preguntó qué podía pasar y eso nos ha hecho ser proactivos y no esperar a que las cosas sucedieran. Eso es fundamental para el éxito de la organización.

AGRADECIMIENTO A LA AFICIÓN. Estoy abrumado por tantos mensajes, llamadas de números que ni tenía agendados, que me han trasladado su apoyo y su gratitud. Y mi gratitud es hacia ellos. Especialmente más vínculo con los que nos han acompañado en el Zamora On Tour. 

"Este ascenso ha llevado al club a una situación de, esperemos, estabilidad y de posibilidad"

VUELTA A ZAMORA. Volví a Zamora con el propósito de llevar a este club a otra dimensión deportiva, social y económica. Ahí está el ascenso de categoría. Socialmente, tenía un propósito más ambicioso del que se ha logrado. Ninguna temporada se ha logrado tantas grandes afluencias en el Ruta. Avilés, Racing, Villarreal, Sant Andreu, San Sebastián de los Reyes... Económicamente pues este ascenso ha llevado a una situación de, esperemos, estabilidad y de posibilidad. Hace un año visualizaba otro escenario, pero dadas las circunstancias, el Zamora puede estar contento por la llegada de un grupo inversor que viene con ilusión.

DESGASTE. He defendido los intereses del Zamora por encima de mi puesto de trabajo. Y lo he hecho porque entiendo que el propósito de cualquier entrenador es el éxito de la organziación que representa. Aunque eso me haya desgastado sobremanera. No vine al Zamora a entrenar, vine a contribuir al éxito de esta organización. Con mis errores, que me he equivocado por supuesto, he sido muy autocrítico con mi trabajo.

TEMPORADA. Ha sido muy dura. No hablo por los cuatro meses de impagos. Hablo por otras circunstancias. Yo en diciembre le comenté a Víctor que me quería ir a mi casa, que era muy duro para mí ver lo que se estaba viendo desde noviembre. Y él fue quien me ha animado y trató de que continuara. Para mí era difícil. Estar a 400 kilómetros de mis hijos, en los 10 u 11 meses me he hecho más de 70.000 kilómetros, más de 70 horas por semana. Y cada vez que me despedía de mis hijos, me preguntaba si valía la pena todo ese sacrificio, y el ascenso podía dar sentido a ese sacrificio. Creo que el ascenso ha supuesto la salvación del club. 

ASCENSO. Solo veía una manera de ascender con este equipo y en estas circunstancias y era llevándoles al límite. Eso me ha generado mucho desgaste, porque no todos en estas circunstancias estaban dispuestos a exigirse y ha sido muy complicado. He tenido que hacer verdaderos malabares para que los jugadores no se desconectaran del propósito del equipo. No sé si hice bien mi trabajo, pero sí sé que lo hice lo mejor que supe.

DATOS. Durante el año se escuchan relatos que no por muchas veces repetidos son verdad. Son casi 150 partidos en el club, con unos números que están ahí. El doble de goles marcados que encajados, 241 por 121, una media de 2,01 puntos por partido, una proyección a 38 jornadas de 76 puntos por temporada. Cuando se nos ponen etiquetas a los entrenadores quizás haya que plantearlas desde el dato que es irrefutable. Récord de puntos en una temporada, 90 puntos. Récord de partidos ganados, 27 de 48; récord de goles anotados, 94 en 38 jornadas, récord de menor número de derrotas en una temporada; mayor goleada de la historia del Ruta, con un 9-0; récord nacional de Tercera División con 41 partidos invicto; récord del mejor arranque de la historia del fútbol profesional y semiprofesional de España, con 6 victorias seguidas sin encajar un gol. También era la primera remontada en un playoff, con este entrenador que habla, a pesar de las etiquetas.

BAGAJE. Son ya cuatro ascensos los que llevo en mi trayectoria a la tercera categoría del fútbol profesional y siento que voy a tener que ascender una quinta vez para poder volver a tener la oportunidad de entrenar en esta categoría. Esto no va de justicia ni de mértidos. No solo me siento capacitado para entrenar en esta categoría, sino también legitimado. Tengo muy claro qué hace falta al Zamora para seguir creciendo. Ya no me corresponde a mí contribuir o ayudar en esta organización, pero espero que la familia Páez encuentre el camino y que entre todos le permitan llevarlo a cabo. El rival tiene que estar enfrente cada domingo, no en casa.

MENSAJE A LA SOCIEDAD ZAMORANA. Lo importante es el escudo, por encima de las personas y de los egos, y este año no siempre ha sido así. Yo coy a renovar mi carné de socio y el de mis hijos, y ojalá muchos zamoranos se suban a este barco. Lo deseo de corazón y ojalá esa energía que se ha generado en los últimos meses sea una continuidad de algo grande. Tengo muy claro que lo que se ha generado a nivel social, es algo que si hubiese tenido más continuidad, creo no era un reto imposible, haber tenido 4.000 personas de media en el Ruta de la Plata. Se podían haber hecho mejor las cosas como club, que no digo que se hayan hecho mal.

SENSACIONES. Me siento por un lado triste de tener que irme, pero muy feliz de haber estado y satisfecho del deber cumplido y eso me lo llevaré siempre en el recuerdo. 

"En diciembre sentí que no estábamos alineados y me pregunté si realmente merecía la pena el sacrificio"

DICIEMBRE. Fue un cúmulo de circunstancias. Muchas cosas. Cuando sentí que desde dentro no estábamos alineados y que el rival no estaba cada domingo enfrente, sentí que no era el proyecto que había visualizado. Me pregunté si merecía la pena y también lo comuniqué en enero. Sí es cierto que luego vinieron otras circunstancias y me pregunté qué podía hacer. Ha sido un desgaste muy grande. Dentro de la plantilla, del club, del entorno... Añadiendo el estar tan lejos de mi casa y de mis hijos, se me han hecho tremendamente difíciles y quiero  que prevalezca un mensaje no de unión, sino de propósito compartido.

SALIDA DEL CLUB. Están totalmente legitimados porque son los dueños del club. Respeto muchísimo su decisión, entiendo que traigan a su gente de cofianza. Las únicas dos cosas que podría transmitirles se lo he hecho a nivel personal y a nivel privado, y así es como creo que debe ser.

POSIBLE CONTINUIDAD. Me hubiera gustado saber de primera mano el proyecto que tenían para saber si las cosas que han pasado este año podían haber ido en otra línea. Si la nueva propiedad me hubiera transmitido un proyecto acorde a lo que este club requiere, que seguro que lo tienen aunque no lo conozco, pero seguramente me hubiera vuelto a ilusionar. Si me dicen que voy a vivir el mismo año que he vivido este, pues hubiera preferido dejar el club, pero son todo suposiciones.

APRENDIZAJES. He aprendido mucho. He defendido a los jugadores porque era mi propósito y mi responsabilidad. Nunca señalarles, pero tal vez alguno se había tenido que defender aquí, y no yo, por algunas circunstancias que se han dado, pocas. Me llevo multitud de mensajes y llamadas de jugadores y les he dado las gracias y les sigo dando las gracias, pero ha habido situaciones que ellos verbalizan que la temporada ha sido muy dura para ellos. Yo les dije que teníamos una responsabilidad con el escudo y la ciudad, cobráramos o no, que yo no iba a levantar el pie. Teníamos que honrar nuestra profesión y eso se cuestionó aquí. Hubo alguien con mucho peso que me preguntó eso y dije que si querían que levantara el pie, en vez de recorrerme España para ver partidos, iba a Bilbao a ver a mis hijos. Los únicos que tenían asegurado su salario eran ellos, con AFE. Yo lo he pasado muy mal. Les dije que la única posibilidad de que hubiera viabilidad, posiblemente pasaba por el ascenso. Y creo que les falta vida para saber lo que es duro. Venir a las 10 de la mañana y marchar a las 2 de la tarde comidos, creo que muchos lo valorarían. 

"Tengo muy claro que he defendido este escudo y he honrado mi profesión hasta el último día, y hay jugadores que también lo han hecho. Estoy preparado para el siguiente reto"

PROBLEMAS ECONÓMICOS. Les pregunté uno por uno a los jugadores si tenían algún problema económico hasta final de temporada. Solo uno tenía y traté de ayudarle. Porque no quería que pusieran el foco ahí. Mi preocupación ha sido esa, que su mente y su foco estuvieran en el fútbol. Y he tenido que levantar el pie en algunas cosas, porque había jugadores que no estababn dispuestos y eso ha sido muy complicado, pero nunca me he desviado de mi propósito y me he equivocado como el que más. Pero tengo muy claro que he defendido este escudo y he honrado mi profesión hasta el último día. Y que hay jugadores que también lo han hecho. Ha sido una temporada muy difícil para mí, pero muy agradecido de haberla vivido porque me ha hecho mejor entrenador, y estoy mejor preparado para el siguiente reto. Entendía que las circunstancias requerían un nivel de compromiso mayor si cabe, y no todos estaban dispuestos a pagar ese precio.

DESGASTE CON LA PLANTILLA. Para mí hubiera sido tremendamente sencillo tener a todos contentos. Levanto el pie, nos dejamos llevar, todos están cómodos, no les sacas de su zona de confort y el resultado hubiera sido que el club se hubiera quedado en Segunda RFEF seguro. Conozco muy bien a esta plantilla y había ciertos botones que se tocaron durante la temporada  y uno de ellos era el orgullo. Creo que en los equipos de alto rendimiento el orgullo es un valor muy importante y cuando lo hemos tocado, el equipo ha respondido. Este equipo, si algo tenía, era orgullo. Y ha sido determinante.

VESTUARIO. Creo que los equipos de alto rendimiento requieren de grandes vínculos de calidad. Si hubiéramos construido ese equipo de alto rendimiento, hubiésemos peleado el primer puesto con Ourense hasta la última jornada. Asociar causa-efecto en el fútbol creo que es muy poco profundo. Creo que ha habido que hacer malabares y lograr dejar al club en Primera RFEF no ha sido un milagro, pero se acerca por todas las circunstancias vividas.

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